Fernando Martorell, coordinador del área de comercio exterior del Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán (IDEP) brinda en esta nota precisiones acerca de la importancia de la logística en la producción de arándanos.
“Teniendo en cuenta las distancias que tenemos con nuestros mercados, la cuestión logística pasa a ser un punto clave para poder llegar a los mercados distantes con arándanos de calidad y que conserven todas sus condiciones y características. Este es uno de los grandes desafíos que tienen los exportadores de la región”. Así lo manifiesta Fernando Martorell, coordinador del área de comercio exterior del IDEP.
Al tratarse de un producto tan perecedero la logística pasa a ser un punto crítico. Y es por eso que debemos tomarlo como un proceso en general. El objetivo principal es tratar de que vaya desde el empaque del exportador hasta el país de origen y de allí al destino final en óptimas condiciones.
Según los dichos de Martorell, el proceso logístico comienza en el empaque con la tarea de preparar y seleccionar la fruta. Una vez armados los pallets hay que tener en cuenta muchas condiciones, como es el mercado de destino de la fruta, características que exigen los organismos de control, seguir cuidadosamente los procedimientos exigidos, las recomendaciones que se hacen de acuerdo a los puntos de cargas de cada uno de los aeropuertos o puertos de envío, contar con transporte interno de calidad que puedan dar condiciones adecuadas para que la fruta posea la cadena de frio requerida y llegue con todas las condiciones.
La recepción en puertos y aeropuertos, tanto en origen como en destino son cruciales, por lo tanto es importante el monitoreo para tratar de lograr que los servicios que brindan las empresas que reciben la fruta sean los adecuados en tiempos de espera en los aeropuertos y depósitos, cuidando que no sean extensos y que las condiciones de temperaturas sean adecuadas. Así se asegurará que la carga llegue a destino en las mejores condiciones, indicó el coordinador de IDEP.